ÁFRICA/ANGOLA - Proyecto de las Naciones Unidas para el restablecimiento de los tribunales de menores en Angola

lunes, 10 mayo 2004

Roma (Agencia Fides) - Aplicación de la ley de menores, tribunal de menores y creación de centros de prevención y reintegración; éstos los resultados obtenidos por un programa puesto en marcha en Angola por el Instituto Internacional de la ONU para la Investigación sobre el Crimen y la Justicia (UNICRI), en colaboración con el gobierno italiano y dos organizaciones no gubernamentales italianas: Voluntariado Internacional para el Desarrollo (VIS) y Centro de Información y de Educación al Desarrollo (CIES). El proyecto tiene por finalidad la creación de un sistema de justicia para menores en un país gravemente damnificado por 25 años de guerra civil.
En Angola, de sus 13,6 millones aproximadamente de habitantes, casi el 50% tiene menos de 15 años; 90.000 niños son minusválidos y 750.000 menores son huérfanos de guerra. Se calcula che más de 100.000 menores viven lejos de su familia. Muchos de ellos son niños de la calle, expuestos al riesgo de la explotación sexual, de las violencias y de los trabajos forzados (en relación con el trabajo de los menores en Angola, vea Fides del 13 de marzo de 2003).
Durante la guerra civil (1975-2002), se usó a los niños como carne de cañón, a menudo drogados para cumplir los trabajos más difíciles y peligrosos, como el barrido de minas, y muchas niñas se vieron obligadas a convertirse en esclavas sexuales de los milicianos. A consecuencia de ello, el problema de las neurosis post-traumáticas se encuentra muy difundido entre los ex niños-soldado. Sólo volver a reunirse con las familias de origen podría contribuir a favorecer su regreso a la normalidad.
Se estima que al menos tres millones de niños ni siquiera hayan sido registrados y que vivan separados de sus familias.
En este contexto, el sistema judicial de menores dejó de ser operativo hace más de 10 años. Desde entonces, los niños han sido procesados por los tribunales para adultos y aunque no sean responsables legalmente de sus actos hasta los 16 años, se les encarcelaba junto a ellos. A muchos de ellos se les retenía en situación de detención preventiva durante un periodo que superaba los tres meses (el máximo previsto por la ley), y llegaba incluso hasta los 14 meses, y raramente tuvieron posibilidad de recurrir a un abogado.
El proyecto de la UNICRI mira a restablecer el sistema judicial que estaba en vigor en Angola: el mecanismo de reconciliación comunitario. El programa ha desarrollado dos componentes: la primera en el área legal e institucional (administración de la justicia de menores, creación del tribunal de menores), y la segunda en aquella social (desarrollo y lucha contra la pobreza a través de la prevención y la protección de los derechos de los menores).
El tribunal de menores ha sido concebido como un instrumento relacionado con el “tejido social”. Los jueces, para emitir su sentencia, recurren ahora a elementos como el perfil psicológico y las condiciones de vida de los jóvenes imputados. (L.M.) (Agencia Fides 10/05/04; ; líneas 37, palabras 502).


Compartir: