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Ginebra (Agencia Fides) - Liberar inmediatamente a la activista para los derechos humanos Aung Sans Suu kyi, todavía en arresto domiciliario, y con ella, a los otros detenidos políticos: es la petición oficial dirigida al gobierno birmano de la Comisión ONU para los Derechos Humanos, reunida en Ginebra para su asamblea anual. La Comisión ha pedido también al gobierno que frene las “violaciones sistemáticas” de los derechos humanos y que disminuya las restricciones impuestas a las actividades políticas no violentas. La moción, presentada por la Unión Europea, Estados Unidos y Corea del Sur, ha sido aprobada por unanimidad por los 53 miembros de la Comisión.
La recomendación añade presiones al gobierno bimano después de que hace algunos días, la junta militar al poder concedió la reapertura de la sede de la Liga Nacional para la Democracia en la capital Yangon. La Liga es el movimiento político de oposición, dirigido por la activista Aung SanSuu Kyi, premio Nóbel de la paz en 1991. Según voces circulantes, la mujer podría ser liberada en breve tiempo, pero según otros observadores podría continuar en arresto por lo menos hasta el 17 de mayo, día de la apertura de los trabajos de una Convención nacional que deberá diseñar una nueva Constitución del país.
La Comisión ONU ha declarado que a precia los esfuerzos de un “road map” para la democracia en Myanmar, pero ha señalado la necesidad de establecer un plan con tiempos detallados que implique a todas las partes políticas presentes en el país.
La participación de representantes de la Liga y de la misma Suu Kyi ha sido definida por los observadores internacionales como condición imprescindible para dar credibilidad al proceso de democratización presentado por la actual junta que subió al poder en 1988 en un país gobernado militarmente desde 1962. (PA) (Agencia Fides 22/4/2004 Líneas: 24 Palabras: 314)
