VATICANO - El Papa Benedicto XVI recuerda el celo y la pasión con la que el Card. Alfonso López Trujillo desarrolló "una incansable acción de tutela y promoción de la familia y matrimonio cristiano"

miércoles, 23 abril 2008

Ciudad del Vaticano (Agencia Fides) - Esta mañana, 23 de abril, ha tenido lugar en el altar de la Cátedra de la Basílica Vaticana, las Exequias del Card. Alfonso López Trujillo, Presidente del Pontificio Consejo por la Familia. La Santa Misa ha sido presidida por el Card. Angelo Sodano, Decano del Colegio Cardenalicio. Al término el Santo Padre Benedicto XVI ha presidido la Liturgia de exequias y ha tenido la homilía. Después de haber recorrido las etapas fundamentales de la vida del Card. López Trujillo, el Papa se ha preguntado: “¿Cómo no destacar, en este momento, el celo y la pasión con que trabajó durante estos casi 18 años, desplegando una infatigable acción en tutela y promoción de la familia y del matrimonio cristiano? ¿Cómo no darle las gracias por el coraje con que defendió los valores no negociables de la vida humana? Todos hemos admirado su incansable actividad… No podemos dejar de estarle agradecidos por la tenaz batalla que libró en defensa de la «verdad» del amor familiar y por la difusión del «evangelio de la familia». El entusiasmo y la determinación con la que actuaba en este campo eran fruto de su experiencia personal, especialmente ligada al calvario que tuvo que afrontar su madre, desaparecida a los 44 años de edad tras una dolorosa enfermedad”.
Benedicto XVI ha puesto a continuación de relieve como el Cardenal sacaba “su amor por la verdad del hombre y por el evangelio de la familia a partir de la consideración de que todo ser humano y toda familia reflejan el misterio de Dios que es Amor” y que toda su vida se ha caracterizado por el empeño en la afirmación por la verdad. Citando un escrito suyo, el Papa ha afirmado que "la verdad en el amor siempre fue para él un «polo existencial», primero cuando en Colombia se orientaba a «encontrar el sentido de una genuina liberación en ámbito teológico», y después aquí, en Roma, cuando se dedicó a «profundizar y difundir el evangelio de la vida y el evangelio de la familia como colaborador del Santo Padre”.
El Papa ha concluido recordando la generosidad del llorado Cardenal, que se tradujo " en múltiples obras de caridad, especialmente a favor de los niños en diversas partes del mundo”, y ha deseado que este testimonio “nos sirva de aliento para gastar todo nuestro recurso físico y espiritual por el Evangelio; que nos impulse a actuar en defensa de la vida humana; que nos ayude a mirar constantemente hacia la meta de nuestra peregrinación terrena”. (S.L) (Agencia Fides 23/4/2008; Líneas: 31 Palabras: 445)


Compartir: