AFRICA/ZIMBABWE - “Intervengan inmediatamente o se producirá un genocidio”: llamada de las iglesias cristianas de Zimbabwe a la comunidad internacional

martes, 22 abril 2008

Harare (Agencia Fides) - Los representantes de las iglesias cristianas de Zimbabwe lanzan un llamado a la comunidad internacional para que intervenga en la crisis del País. En un comunicado enviado a la Agencia Fides, firmado también por la Conferencia Episcopal de Zimbabwe, los líderes de las confesiones cristianas locales afirman que el retrazo en la publicación de los resultados del voto del 29 de marzo ha producido “incertidumbre política, ansia y frustración” en el ánimo de los habitantes del país.
En el documento se denuncia la violencia política “perpetrada contra los individuos, las familias y las comunidades, acusadas de haber realizado una campaña a favor o de haber votado por el “partido político equivocado”, en particular en las zonas rurales y en algunas áreas urbanas. La gente está siendo asaltada, torturada, humillada, obligada a participar en comicios donde se escucha repetir que se ha votado por el candidato “equivocado” y que no se debe repetir el mismo “error” en la segunda vuelta, e incluso se han producido asesinatos”.
La violencia política agrava las condiciones de vida de la población: “hay una difundida carencia en gran parte del país. Los negocios están vacíos y los productos alimenticios básicos no se encuentran. Las víctimas de torturas no reciben la ayuda necesaria en los hospitales, totalmente privados de medicinas”.
Las iglesias cristianas de Zimbabwe piden a la Comunidad de Desarrollo de África del Sur (SADC), a la Unión Africana y a las Naciones Unidas “trabajar para frenar el deterioro de la situación política y de seguridad de Zimbabwe. Advertimos al mundo que si no se toman medidas para ayudar al pueblo de Zimbabwe, corremos el riesgo de asistir a un genocidio similar al de Rwanda, Burundi o de otros lugares complejos del África”. Se pide además el cierre de los campos de milicias y de veteranos, que han sido establecidos en diversas zonas del país como “un paso hacia la restauración de la paz y de la libertad de movimiento de las personas, que estaba garantizada antes y durante las elecciones del 29 de marzo”. Los líderes cristianos locales piden a la Comisión Electoral publicar los “verdaderos resultados de las elecciones del 29 de marzo sin ulteriores retrasos”.
Dirigiéndose, finalmente, a la población de Zimbabwe, los responsables de las iglesias cristianas alaban el sentido cívico demostrado yendo a votar, e invitan “a mantener y proteger la propia dignidad y el propio voto”, rechazando las amenazas, los chantajes y la violencia. (L.M.) (Agencia Fides 22/4/2008; líneas 31, palabras 426).


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