VATICANO - EL PAPA EN EL ÁNGELUS: “SABER QUE DIOS NO ESTÁ LEJOS, SINO CERCANO; QUE NO ES INDIFERENTE, SINO COMPASIVO; QUE NO ES AJENO, SINO UN PADRE MISERICORDIOSO QUE NOS SIGUE CON CARIÑO EN EL RESPETO DE NUESTRA LIBERTAD: ESTE ES MOTIVO DE UNA ALEGRÍA PROFUNDA QUE LAS CAMBIANTES VICISITUDES COTIDIANAS NO PUEDEN OCULTAR”.

lunes, 15 diciembre 2003

Ciudad del Vaticano (Agencia Fides) – La liturgia del tercer domingo de Adviento denominada “Gaudete” contiene una repetida y explicita invitación al gozo y a alegrarse, según la recomendación del apóstol Pablo: “¡Alegraos en el Señor siempre... el Señor está cerca1” (Fil. 4,4-5). “El Adviento es tiempo de alegría, pues permite revivir la espera del acontecimiento más alegre de la historia: el nacimiento del Hijo de Dios de la Virgen María”, dijo el Santo Padre antes de rezar el Ángelus con los fieles reunidos en la plaza de San Pedro el domingo 14 de diciembre.
“Saber que Dios no está lejos, sino cercano; que no es indiferente, sino compasivo; que no es ajeno, sino un Padre misericordioso que nos sigue con cariño en el respeto de nuestra libertad: este es motivo de una alegría profunda que las cambiantes vicisitudes cotidianas no pueden ocultar”. El Santo Padre señaló después que una característica inconfundible de la alegría cristiana “es que puede convivir con el sufrimiento, pues se basa totalmente en el amor. De hecho, el Señor que se encarna, viene a infundirnos su alegría, la alegría de amar.”.
Después del Ángelus, saludando a los niños y jóvenes reunidos en la plaza de san Pedro para la bendición de los Niños Jesús que serán colocados en los nacimientos, el Santo Padre se dirigió a los chicos con esta invitación: “cuando pongáis en el Nacimiento la imagen del Niño Jesús, rezad una oración por mí y por las muchas personas que se dirigen al Papa en sus dificultades”.
(SL) (Agencia Fides 15/12/2003 Líneas: 27 Palabras: 323)


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