ASIA/CHINA - La prolongada fiesta nacional del 1 de octubre se ha convertido para los católicos de Nan An, en la provincia de Fu Jian, en un gran festejo en honor de la Patrona de las Misiones

jueves, 11 octubre 2007

Nan An (Agencia Fides) - “Cada fiel está invitado a cooperar más estrechamente en el feliz anuncio del Evangelio. Deseo que todos podamos seguir fielmente la palabra del Papa, comenzando por nosotros mismos, y ser así misioneros en la vida llevando a Cristo a todos”: es la exhortación que P. Lin Yong Quan, párroco de Quan Zhou en la provincia de Fu Jian, en el sudeste de la China continental, ha dirigido a sus fieles durante la peregrinación de la parroquia en la fiesta litúrgica de Santa Teresa de LIsieux, Patrona de las Misiones y Patrona de la Parroquia. El 1 de octubre los parroquianos de Quan Zhou, aprovechando las largas vacaciones por la fiesta nacional, acudieron temprano por la mañana a la Parroquia de Jin Tao, que está también dedicada a la Santa Patrona de las Misiones, para cumplir así con su peregrinación y destacar la fraternidad misionera inaugurando el mes misionero. Durante la homilía, el párroco citó en varios pasajes la Carta que el Santo Padre Benedicto XVI envió al Prefecto de la Congregación para la Evangelización de los Pueblos, Card. Iván Dias, con ocasión del Año de la Misión que se proclamó para Lisieux para el 2007. Explicó de este modo la importancia de Santa Teresa, siempre tan querida por los católicos chinos: “Nos unimos a la Iglesia Universal que festeja los 80 años de la proclamación de la Patrona de las Misiones. Como nos enseña el Papa, ‘sin haber salido jamás de su Carmelo, a través de la su oración contemplativa y la correspondencia tenida con algunos sacerdote, vivió, a su modo, un auténtico espíritu misionero, ofreciendo al mundo una nueva vía espiritual que le ha obtenido el título de Doctora de la Iglesia, exactamente hace 10 años. Es esto lo que debemos ser: ‘a través de la oración, el testimonio de vida y el compromiso cristiano en todas sus formas, cada fiel debe ser misionero donde quiera que esté, para que nazcan así las vocaciones al anuncio del Evangelio a los hombres que todavía no los conocen’”.
La comunidad católica de Quan Zhou ostenta la más antigua y gloriosa historia de la evangelización, que se remonta al año 300. Fue evangelizada por los primeros misioneros franciscanos, y todos los más famosos misioneros -franciscanos, agustinos, jesuitas, dominicos- dejaron una huella extraordinaria en la comunidad de Quan Zhou. (NZ) (Agencia Fides 11/10/2007; líneas 29, palabras 426)


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