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Canberra (Agencia Fides)- “El divorcio y la Iglesia Católica”: es este el título de un vademécum apenas publicado por la Conferencia Episcopal Australiana y difundido en todas las diócesis y las parroquias del continente. El manual -redactado en la cómoda forma de preguntas y respuestas- ha estado a cargo de la Comisión episcopal para la Familia y para la vida, para presentar válidas razones desde el punto de vista de la fe, de la cultura y de la sociedad, a la práctica del divorcio, que en Australia está destruyendo a muchas familias y la vida de sus hijos.
Como explica la introducción, el texto retoma y completa la publicación de “El matrimonio y la Iglesia católica”, editado en el 2006, recordando que el matrimonio es “una vocación donada por Dios a través la cual un hombre y una mujer se donan el uno al otro por la vida entera. Es una oportunidad para experimentar un amor que responde a las aspiraciones más profundas de la vida humana. Por esto la ruptura de un matrimonio tiene un grave efecto de dolor y desilusión. Difícilmente hoy en día una familia no es tocada por este evento, sea por los propios miembros que por los parientes”. Por estas razones el vademécum busca “explicar con claridad la aproximación de la Iglesia al Sacramento del Matrimonio” y a su indisolubilidad, afrontando también diversas cuestiones de la pastoral de los divorciados.
El texto será difundido en parroquias, centros sociales, entre los operadores pastorales, pero también está destinado a simples fieles, a las familias, a todos aquellos que quieren tener una aclaración o a todas aquellas parejas que desean tener un apoyo pastoral. Vistas las aplicaciones, se prevé que el libreto tendrá prontamente una vasta difusión.
Entre las preguntas presentes, están: ¿Por qué el matrimonio es importante para la Iglesia? ¿Por qué algunas parejas se dan cuenta de no ser más capaces de vivir su matrimonio? ¿Cómo responden los esposos a los desafíos del matrimonio? El texto explica también la posibilidad y los casos de anulación de un matrimonio e ilustra la delicada cuestión que se refiere a las posibilidades de los divorciados de recibir la Eucaristía.
“Esperamos que el texto provea una guía y un aliento a todos aquellos que viven la experiencia dolorosa del divorcio y en particular las implicaciones en la vida de sus miembros”, afirma la Comisión episcopal. (PA) (Agencia Fides 14/9/2007, líneas 32, palabras 433)
