ASIA/TIERRA SANTA - Los Salesianos y el muro de Belén: que los pueblos escojan la paz y la fraternidad.

miércoles, 5 septiembre 2007

Belén (Agencia Fides) - El muro de separación construido en Tierra Santa continúa a traer sufrimiento a la población civil y problemas a las comunidades religiosas presentes en el territorio. Al iniciarse los trabajos para la construcción del Muro de Separación israelita en la municipalidad palestina de Beit Jala, los Salesianos del Medio Oriente han publicado un comunicado, firmado por el vicario de la zona don Giovanni Laconi, donde expresan su contrariedad por la obra y “la esperanza de que los muros entre las personas puedan desaparecer en un futuro de paz”.
“Todo el recorrido del Muro, incluyendo el trecho que pasa por la propiedad salesiana de Cremisan, ha sido establecido de forma completamente autónoma por las autoridades israelitas, a pesar del conocido parecer consultivo emitido por la Corte Internacional de Justicia el 9 de junio de 2004. La Comunidad Salesiana, victima de una decisión impuesta por las autoridades israelitas, se opone firmemente a la política de separación unilateral; confirma la completa extrañeza a la planificación del recorrido del Muro y, al mismo tiempo, se dirige a las autoridades competentes pidiendo el restablecimiento de la legalidad internacional”.
El recorrido del Muro pasa por la Casa Salesiana con el fin de rodear la colonia israelita de Har Gilo, que se encuentra sobre una colina, y conectarla así a la municipalidad de la Gran Jerusalén, instituida unilateralmente por Israel en 1967. “La Casa de Cremisan —se explica— se encuentra al interior de esta municipalidad, confinada entre las colonias de Gilo y de Har Gilo, por lo tanto la posibilidad de excluirla no ha sido nunca tomada en consideración. A los Salesianos nunca les han presentado la oportunidad de escoger el lado del Muro, ya que las autoridades israelitas han decidido a priori la posición de la Casa dentro de los límites de la municipalidad por ellos mismos trazados”.
El trecho de Muro a lo largo del confín entre la Casa de Cremisan y el pueblo palestino de Al-Walajeh está siendo construido sobre la propiedad salesiana, evitando de atravesar el territorio del pueblo que de otra manera sufriría un impacto aún más grave.
“Frente a la construcción del Muro —precisan los religiosos— la Comunidad Salesiana no ha contribuido de ninguna manera a agravar la difícil condición del pueblo palestino, tampoco ha favorecido de alguna forma, directa o indirectamente, el embargo de terrenos pertenecientes al pueblo mismo”.
Los responsables de la Comunidad Salesiana, que han estado y permanecen abiertos al diálogo con los habitantes de la zona, a los que varias veces han prestado servicios significativos de utilidad social, renuevan la más sentida solidariedad con el pueblo de Al-Walajeh y con toda la población palestina victimas de las asperidades de la ocupación, deseando en el futuro gestos de reconciliación, paz y fraternidad entre los dos pueblos. (PA) (Agencia Fides 5/9/2007 líneas 34 palabras 477)


Compartir: