ASIA/TIERRA SANTA - “ARRANCAR DE LOS CORAZONES EL IDOLO DEL ODIO Y DEL RENCOR”: MENSAJE DEL MINISTRO GENERAL DE LOS HERMANOS MENORES, PEREGRINO EN TIERRA SANTA A LA GRUTA DEL NACIMIENTO

miércoles, 5 noviembre 2003

Belén (Agencia Fides) – Un grito de paz en el nombre de San Francisco ha salido de la Gruta del Nacimiento en Belén donde el recién elegido Ministro General de los Hermanos Menores, P. José Rodríguez Carballo, ha acudido en peregrinación durante los días pasados.
“La venganza y el odio, hoy como ayer, parecen tener la última palabra (...) y Raquel sigue llorando por los hermanos – hebreos, cristianos y musulmanes- que, proclamando su fe en el único Dios, continúan amenazando”. Así se ha expresado el Ministro General en un mensaje pronunciado durante esta visita.
“Mientras pedimos el don de la paz en esta tierra bañada por la Sangre del Cordero que quita el pecado del mundo – continua el mensaje-, en esta Tierra Santa para las tres grandes religiones monoteístas, no podemos menos que gritar y condenar, una vez más, el terrorismo, la violencia, la guerra. Lo hacemos con la débil voz de Francisco, pero que es fuerte por la potencia del Evangelio: en nombre de Dios, que nosotros, hebreos, cristianos y musulmanes confesamos como fuerte, grande, misericordioso”.
El deseo de los padres franciscanos en Tierra Santa es que “trabajemos todos incansablemente para que las heridas sean curadas y sobre esta tierra se derrame como un río la paz”.
“Haciendo eco de las palabras de Juan Pablo II – concluyó el P. Carballo-, profundamente convencidos, repetimos hoy: no hay alternativa al diálogo y a la paz. Si no queremos destruirnos del todo los unos a los otros no tenemos otra salida que la del diálogo y la paz (...). El diálogo y la paz presuponen el reconocimiento de que los pueblos que habitan esta tierra tienen todos el mismo derecho a la libertad y a la seguridad. El diálogo y la paz presuponen perdonar y arrancar de nuestros corazones el ídolo del odio y del rencor. Las comunidades de los creyentes – hebreos, cristianos y musulmanes-, si quieren contribuir a la paz en esta tierra, deben transformarse en religiones de paz y superar todo lo que en nuestras tradiciones podría favorecer la hostilidad y la destrucción del otro”.
(PA) (Agencia Fides 5/11/03. Líneas: 31- Palabras: 371)


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