VATICANO: “Dios: ¿paz o dominio?” en onda el próximo martes, 19 de junio, en Rai Uno a las 23 horas. Segunda etapa de un largo viaje a los confines más remotos de las religiones del mundo. Título: “Dios: ¿por Amor o por Odio?”

lunes, 18 junio 2007

Ciudad del Vaticano (Agencia Fides) - «Dios: ¿por Amor o por Odio?». Es este el tema del segundo episodio de “Dios: paz o domino” que se emitirá el próximo martes, 19 de junio, en Rai Uno a las 23 horas. Luego del éxito que tuvo en el público el primer episodio: “Dios: paz o domino” vuelve a hacer frente al delicado tema de la convivencia entre los pueblos y las religiones, presentando algunos de los 88 testimonios recogidos en tres años por todo el mundo por los caminos de las mayores tradiciones religiosas: Cristiana, Mulsumana, Hinduista, Animista, Budista, Taoísta, Jiani, Bahay.
“Muchos se declaran por la paz. Todos rechazan la violencia. Pero una vez terminadas las manifestaciones, son los moderados en los territorios de violencia, los que están más amenazados, los primeros en ser golpeados. La esperanza de la convivencia es defenderlos de todas las intimidaciones, de todas las amenazas. Los enemigos de la convivencia, de la confrontación civil, quieren que sus voces se callen. ¿Por qué? Porque también hoy el fundamentalismo religioso es una realidad existente y viva. Según el gran Gurú Hindú Shri Yamunacharyaji Maharaj Satuwa Baba, quien guía «estos actos terroristas tiene la mente contaminada de egoísmo» «¿Por qué - se pregunta - hay personas que contaminan la mente de otras personas en nombre de la religión? En el mundo de hoy la mente está contaminada, de tal modo que el hombre ve a otro hombre con desconfianza, con odio, sospecha de todos y de todo». En conclusión, «hoy se ha perdido la espiritualidad del ser humano, hay egoísmos, no hay amor», y detrás de todo esto está el hombre que no llega a «desarrollar el calor» que está dentro de su «alma».
Y, en este sentido, llega de la India un intento de convertir el corazón del hombre a la paz, del más alto cargo religioso de la gran comunidad Sikh. “Joginder Singh Vedanti” - Head Priest del Golden Temple: «La religión Sikh cree en un sólo Dios. Dios cuida a todos, hace crecer a todos y perdona a todos... Para nosotros Sikh ... cada uno tiene que poder rezar según sus propios modos, respetando el de los otros. Cada persona tiene que aceptar los otros».Son únicas las imágenes del Golden Temple y de los ritos que se celebran allí.
Desde la India hasta Siria, no faltan las voces de la paz, de la tolerancia, del diálogo. «La Iglesia sirio-católica de Damasco - dice el Obispo Gregorio Tabe de la Iglesia Sirio-católica ... Es una Iglesia antigua nacida en el tiempo de San Pablo. Cristianos, musulmanes, cada uno de nosotros es un rostro de Dios”.
Muy distinto es el integralismo en las palabras del jeque Swart Sumalyasak, jefe de la comunidad Islámica en Tailandia: «... ¿Las víctimas de las bombas en Londres? Es necesario considerar la intención de quien lo ha hecho. Era inevitable que hubiera víctimas... El objetivo de los suicidios islámicos es solamente el de dañar a sus enemigos: cuando otras personas que no tienen nada que ver se encuentran involucradas, es una cosa irremediable, porque en estos casos es muy difícil distinguir...» Palabras duras, que testimonian cómo no es fácil instaurar en el corazón de los hombre la categoría del perdón, de la misericordia, del Amor. Y, sin embargo, es un trabajo necesario, precioso e insustituible.
“Dios: paz o dominio”: un trabajo que entra en las religiones, en la diversidad y en las contradicciones. Está convencido también don Oreste Benzi, fundador de la comunidad Juan XXIII, sobre el fundamentalismo religioso: “Sería la victoria de todos aquellos que quieren destruir la Fe,... se creará en las personas, en el hombre, el sentido que la práctica religiosa no sirve para nada, despreciada, ridiculizada y el hombre quedará perdido. Pero la nostalgia de Dios permanecerá siempre, porque el hombre está empapado de la existencia de Dios y de su escucha».
Vivir la Fe en este mundo, vivir la religión como apertura a los otros, es posible en todo credo. Lo dice también el jeque chiíta Shehaden Sheik Hussein, en Damasco, Siria, desmintiendo cuanto había afirmado precedentemente el jeque Swart Sumalyasak, jefe de la comunidad Islámica en Tailandia. «El Islam - dice Shehaden Sheik Hussein - considera sagrada la vida humana más allá de la religión, de la identidad, de la pertenencia a un país determinado y considera que el atentado a la vida de un individuo es un atentado a todos los hombres. Quien mata a un hombre sin que ese haya cometido un mal es como si hubiese asesinado a todos lo hombres”. El jeque afirma todavía: “La agresión contra cada hombre es agresión a la Torah, al Evangelio y al Corán”. Concluye el episodio de “Dios: paz o dominio”, el profesor Andrea Riccardi, fundador de la Comunidad de San Egidio: “Yo creo que muchas veces echamos la culpa a Dios de aquello que los hombres, los pueblos y las mujeres hacen. Uno muchas veces se pregunta “¿dónde está Dios?” pero yo me pregunto “¿dónde estaban los hombre?” Es verdad, los hombres muchas veces son tan violentos que llaman a Dios como testimonio de sus violencias...” ¿dónde estaba Dios?” pero a Dios lo hemos echado nosotros”... y el episodio cierra con las palabras: “Los intereses egoístas de los hombres, sus fanatismos, son los verdaderos enemigos de la paz entre los pueblos”. (P.R.) (Agencia Fides 18/062007 - Líneas: 62 Palabras: 922)


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