AFRICA/COSTA DE MARFIL - “Un milagro de amor llamado Aymé”. Centro de acogida para niños pobres, enfermos y abandonados

jueves, 10 mayo 2007

Aymé (Agencia Fides) - Aymé es un pueblo situado en Costa de Marfil, al interno de la foresta ecuatorial, a alrededor de 150 km de Abidjan. El pueblo comprende diversas etnias y es aquí que surge el hospital católico administrado por los Padres Estigmatinos.
La estructura hospitalaria comprende: reparto de cirugía con un bloque operatorio, un reparto de obstetricia y ginecología, uno de pediatría, una radiología, un laboratorio para análisis, un ambulatorio odontológico, un ambulatorio oftalmológico, un centro para desnutridos y una farmacia. Al interno se encuentra la ‘poupomiere’ donde son acogidos los niños de 0 a 3 años.
Durante una misión humanitaria, Morena Arturi, instrumentista en la sala de operaciones del hospital Santa Cruz Mondovì de Cuneo, entró en contacto con el hospital donde ahora se encarga sobre todo de niños huérfanos, enfermos y pobres que necesitan de atención médica y asistencia familiar. Ella le contó a Fides su experiencia en Aymé, así como la historia del centro de acogida.
En 1998 Emi Massignan, enfermera pediátrica que trabaja desde hace veinte años en Costa de Marfil, inició a acoger a los primeros niños enfermos de Sida o abandonados por las familias. En un primer momento los niños eran acogidos en el reparto pediátrico, donde Emi trabajaba, más adelante, por necesidades de espacio, la vieja casa que albergaba a los médicos al interno del hospital fue transformada en centro de acogida para los niños abandonados. Nació así la poupomiere y, junto al personal marfileño Emi inicia lo que llaman un ‘milagro de amor’.
Los niños acogidos en esta casa tienen de cero a tres años, algunos están enfermos, otros llegaron a la poupomiere por milagro. Encontrados en los mercados o en la foresta de los alrededores, o llevados por uno de los dos padres o por un familiar desde los diversos campamentos de la zona, en Aymé encuentran un refugio, son cuidados y amados. Hasta hoy han sido muchos los niños auxiliados, muchos de los cuales a la edad de tres años han regresado con sus familiar o han sido adoptados.
En los últimos años se presentó la necesidad de ampliar el orfanato, y así, el 17 de febrero de 2007, fue inaugurada la nueva estructura. Actualmente son acogidos 40 niños, y en los próximos cinco años el número aumentará exponencialmente.
“Conozco a Emi desde el 2002 y colaboro con ella desde hace 5 años - dijo Morena a Fides -. En estos años ha sido capaz de regalar sonrisas y amor a los niños. Los ha protegido, los ha criado y los ha guiado hacia un ambiente donde pudiesen ser amados y tutelados. Ella es su mamá, y es también nuestra mamá, porque ella no cría solamente a ‘sus’ hijos sino que nos cría también a nosotros colaboradores que vamos a Costa de Marfil para dar una mano. Hace crecer en nosotros el sentido de humanidad, nos hace formar parte de la comunidad tan diversa de nosotros y de nuestros hábitos.
Desde hace dos años ha iniciado, junto con la población loca, cooperativas para la cultivación del arroz y para la piscicultura, con el fin de tener un mantenimiento autónomo de los recursos alimenticios de los niños y dar una posibilidad a la gente de los campamentos de proveer a sus necesidades. El proyecto involucra sobre todo a las mujeres para lograr que puedan proveer autónomamente a sus necesidades básicas”.
El hospital sirve a un área de alrededor de 200 kms. Vive gracias a la generosidad y a la colaboración de muchos, los que junto a los padres Estigmatinos y a otras figuras religiosas y laicas hacen que la población de Aymé y de los campamentos vecinos tengan constantemente una asistencia sanitaria gratuita. (MA/AP) (10/5/2007 Agencia Fides; Líneas: 45; Palabras: 636)


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