VATICANO - El Papa Benedicto XVI en Brasil - “Este país deberá servir de cuna para las propuestas eclesiales que, con la gracia de Dios, darán un renovado vigor y empuje misionero a este continente”

jueves, 10 mayo 2007

São Paulo (Agencia Fides) - El miércoles 9 de mayo por la tarde, el Santo Padre Benedicto XVI llegó al Aeropuerto internacional de Paulo/Guarulhos, siendo acogido por el Presidente federal del Brasil, así como por las autoridades políticas, civiles y religiosas. En el discurso durante la ceremonia de bienvenida, el Papa subrayó que “Brasil ocupa un lugar muy especial en el corazón del Papa no solamente por su nacimiento cristiano y porque posee un número alto de católicos, sino rpincipalmente porque es una nación rica en potencialidades y con una presencia eclesial que es motivo de alegría y esperanza para toda la Iglesia”. De este modo, Benedicto XVI recordó el sentido de su visita: “vengo a presidir, en Aparecida, la sesión de apertura de la V Conferencia General del Episcopado Latinoamericano y del Caribe. Por una providencial manifestación de la bondad del Creador, este país deberá servir de cuna para las propuestas eclesiales que, con la gracia de Dios, darán un renovado vigor y empuje misionero a este continente”.
El Santo Padre seguidamente subrayó el deber de los católicos, que en esta área geográfica son mayoría, de “contribuir de manera particular al servicio del bien común de la Nación”, y recordó el compromiso profundo de la Iglesia en la misión evangelizadora, “al servicio de la causa de la paz y de la justicia”. En el contexto del tema con carácter misionero escogido para la V Conferencia General del Episcopado Latinoamericano y del Caribe, el Papa recordó “los valores radicalmente cristianos que jamás podrán ser borrados” en el ánimo del pueblo Latinoamericano. “La Iglesia desea tan sólo indicar los valores morales que corresponden a cada situación y formar a los ciudadanos para que puedan decidir conscientemente y libremente. En este sentido, no dejará jamás de insistir en el compromiso que se ha de asumir para asegurar la consolidación de la familia, como célula básica de la sociedad, así como de la juventud, cuya formación constituye un factor decisivo para el futuro de una Nación. Finalmente, aunque no en el último lugar, defenderá y promoverá los valores subyacentes en todos los estratos sociales, sobretodo en las poblaciones indígenas”.
Al término de la ceremonia de bienvenida al aeropuerto de São Paulo-Guarulhos, el Papa se trasladó al Monasterio de São Bento en São Paulo. Luego de un breve momento de oración y del saludo a los monjes benedictinos, el Papa se asomó por el balcón del segundo piso del Monasterio para saludar a los fieles con estas palabras: “¡Queridos amigos! ¡Esta calurosa acogida conmueve al Papa! Gracias por haber querido esperarme. Estos días, para cada uno de ustedes y para la Iglesia toda, serán días llenos de emoción y de alegría. ¡Es una Iglesia en fiesta! De todos los ángulos del planeta se ofrecen oraciones por este Viaje: ¡el primer viaje pastoral a Brasil y a Latinoamérica que la Providencia me concede realizar como Sucesor de Pedro! La Canonización de Fra Galvão y la inauguración de la V Conferencia del Episcopado de América Latina y del Caribe serán piedras miliares de la historia de la Iglesia. ¡Cuento con vosotros y con vuestras oraciones! Muchas gracias.” (S.L.) (Agencia Fides 10/5/2007; líneas 39, palabras 554)


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