ASIA/CAMBOYA - Sida, tuberculosis y hambre en un país donde el 35 % de los 11,5 millones de habitantes vive por debajo del límite de la pobreza

lunes, 12 febrero 2007

Roma (Agencia Fides) - El recorte de fondos que el Programa Mundial de Alimentos (PAM) había destinado a Camboya agrava la desesperación de las 740.000 personas que reciben estos auxilios, entre niños, portadores del virus del Sida y tuberculosos.
Además de asistir a 650.000 niños, el PAM, a través de sus 1.800 puntos de distribución situados en Camboya, otorgaba alimentos a 70.000 adultos contagiados de Sida y a 18.000 enfermos de tuberculosis.
Se trata de uno de los tres países con la mayor tasa de incidencia de Hiv/Sida, junto a Birmania y Tailandia. Según el Programa Conjunto de las Naciones Unidas sobre Hiv/Sida, la preponderancia del Sida entre los camboyanos de 15 a 49 años, está en una media del 1,6 % (entre el 0,9 y el 2,6 por ciento según los distintos grupos de edades).
La alimentación constituye una parte esencial para la asistencia de las personas en cuidados por Hiv y Tbc. Los enfermos deben comer antes de consumir las medicinas. No se pueden ingerir fármacos con el estómago vacío. “Las personas con Hiv y tuberculosis van a ser los más afectados por estos recortes”, afirmó el director de la agencia humanitaria cristiana “World Vision” de Phnom Penh.
La organización, que trabaja en cinco provincias rurales, ha garantizado a cada jefe de familia contagiado de Hiv, un suministro regular de asistencia alimenticia que incluye 15 kg de arroz al mes, aceite para cocinar, azúcar y sal.
El país es uno de los más pobres de Asia sudoriental. Casi el 35 % de los 11,5 millones de habitantes viven por debajo del límite de pobreza y la esperanza de vida es de 56 años, una de las más bajas de la región. Según el Índice Global del Hambre, Camboya está entre los doce lugares que sufre más el hambre en el mundo. Los otros once países se encuentran en África subsahariana. (AP) (12/2/2007 Agencia Fides)


Compartir: